Los quistes dermoides intracraneales son neoplasias congénitas benignas que se forman a partir del las capas ectodérmicas embrionarias, durante el desarrollo del tubo neural que acontece desde la tercera hasta la quinta semana de gestación. Suelen pasar desapercibidos y se descubren, en la edad adulta, de manera accidental durante una exploración de Tomografía Computarizada o Tomografía por Resonancia Magnética; salvo cuando se rompen de manera espontánea y el contenido lipoideo del quiste se derrama por el líquido cefalorraquídeo provocando un cuadro irritativo meníngeo grave.
La composición histológica de los quistes dermoides favorece el diagnóstico preciso e inmediato con cualquiera de las dos modalidades de Neuroimagen mencionadas. El quiste dermoide está formado por una cápsula fibrosa recubierta internamente por una capa de epitelio escamoso estratificado donde se encuentran folículos pilosos, glándulas sebáceas y sudoríparas. A veces, se observa en las exploraciones de Tomografía Computarizada, una calcificación curvilínea de la cápsula fibrosa. Todas estas glándulas vierten sus secreciones al interior del quiste que almacena una fluido espeso de lípidos y sales de colesterina (Figura 1). La localización más habitual de estos quistes es en las fosas craneales, junto a la línea media.
FIGURA 1) Representación pictórica figurada de un quiste dermoide, en el que predomina el contenido de material lipoideo.
Key Words: Lipoid Meningitis. Spontaneous Rupture of an Intracranial Dermoid Cyst.